"Mientras usted viva bajo este techo se hace lo que yo diga,".
"Mientras usted viva bajo este techo se hace lo que yo diga,".
Hoy celebramos el día de las madres en Colombia, y en muchas partes del mundo, y mi homenaje de hoy consiste en rescatar sus palabras, sus frases, esas que se quedan para siempre en la memoria cuando como en mi caso, mi madre está en el Cielo; pero que hoy gracias a un experimento de inteligencia emocional, y no artificial, que hice entre mi familia, mis estudiantes, mis colegas y mi propia memoria, recojo como una dedicatoria, para ustedes hermosas y grandes madres de hoy, de ayer, de siempre y para siempre… Y comenzaré con una típica: “Usted me hace caso y punto”, porque soy su mamá, sin peros, bueno y si uno no responde y tiene dos nombres acto seguido se escuchaba en mi caso: “Nelson Guillermo, que le estoy hablando”, y bueno podría uno luego escuchar algo que me escribieron mucho en esta recolección documental: “¿Para dónde va?, usted no se manda solo, ¿con quién va a ir?”, bueno finalmente me imagino que se escapaban o no, pero, entonces de la nada surge: “¡Vaya que es una orden!”, “y no me abra esos ojos, que se le van a salir”… o como escucho frecuentemente “Dios del Universo, qué hice yo, que estaré pagando”, pero saben como suenan de lindo esas frases cuando vienen cargadas de amor, de amor de madre, porque madre no hay sino una.
Y bueno hay muchas frases que la verdad están llenas de enseñanzas, para el resto de nuestras vidas: “Cuando yo estaba joven me tocaba hacer caso y si no me pegaban, Para mí siempre serás mi bebé, ¿qué pasa si yo voy y lo encuentro?, Cuando usted va yo ya fui y volví 3 veces, no salte que se cae y si se cae le pego, el perezoso trabaja el doble, en la demora…está el peligro, mientras usted viva bajo este techo se hace lo que yo diga, primero se gatea, luego se camina y luego se corre…¡difícilmente se vuela!, no se coma eso que allá en la calle harta gente está muriéndose de hambre, se les va a acabar pronto la sirvienta, eso, métame los dedos a la boca a ver si estoy mueca, una infaltable, y que es muy cierta, ¿qué van a hacer cuando yo falte?, eso le pasa por andar descalzo, lo único que le queda a uno en la vida es…lo que aprende, no hay cosas imposibles, sino hombres incapaces…mis hijos se la saben de memoria, Miel Antonieta porque hizo eso, se puede en la anterior cambiar el nombre y aplica para todos, eres mi milagro de vida, eres mi razón de vivir, y se vale repetir una que me encanta, búsqueme y verá que me encuentra, o la típica que se dice en la calle, en la casa arreglamos, y agradezca que no le cuente a su papá, porque madre no hay sino una, o si no, no se da cuenta que usted conoció primero a su mamá”… está durante los noviazgos y muchas veces durante el matrimonio, más usada con los hijos, pero aplica para las hijas con frecuencia.
Bueno y para ir cerrando este homenaje en sus palabras, unas mías para ustedes: gracias por usar el lenguaje, por usar las frases, por llenarnos de amor con su palabras, por hacerlas universales, por ser tan únicas, por enseñarnos, por corregirnos, por aguantarnos, por darnos la vida, por escoger ese padre para nosotros, porque como ustedes dicen: “no lo repito dos veces, pues porque soy su mamá”… feliz día madres, tías, hermanas, amigas, estudiantes que son madres, oyentes lectoras y feliz día a esas madres únicas…porque me vas a sacar canas verdes y de todos los colores, pero así son las mamás y las amamos por ser.
Por: Nelson Guillermo García Gaitán.
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Arnoldo Mutis
Raro será quien no se sienta identificado con lo que dice el podcast. Muy chévere la reflexión. De paso, deja ver cuánto buen humor, ademas de realismo y sensatez, hay en el lenguaje de las mamás. Gracias, profe.