Tensión en la negociación del salario mínimo 2026

Fabio Arias, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, afirmó que los sindicatos no se sentarán a negociar mientras los empresarios no lleven su propuesta a dos dígitos.

Señaló que están dispuestos a revisar su aumento del 16 por ciento, pero solo si el sector empresarial muestra un movimiento real. La Confederación de Trabajadores de Colombia, CTC, respaldó esta postura y pidió una señal positiva.

Del lado empresarial, gremios como la Andi, Acopi y Fenalco mantienen su propuesta del 7,21 por ciento. La presidenta de Acopi, María Elena Ospina, insistió en que el 16 por ciento es demasiado alto. A su turno, Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, aseguró que la cifra sindical triplica la inflación anual y no es sostenible. Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, advirtió que la decisión sobre el salario mínimo no solo afecta a quienes reciben esa remuneración, sino que también puede impactar el mercado laboral del país. Explicó que un aumento muy alto podría generar mayores costos para las empresas y afectar la estabilidad del empleo formal. Añadió que estas decisiones terminan influyendo en el consumidor final, quien asume los efectos de un incremento mal calculado.

El ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, afirmó que las negociaciones avanzan con optimismo y que ambas partes han mostrado disposición para revisar cifras y supuestos. Señaló que ninguna propuesta es inamovible y confirmó que antes del 15 de diciembre se realizará una audiencia pública para escuchar voces externas. Las centrales obreras consideran difícil un acuerdo antes de la fecha límite. El Gobierno continuará evaluando si existe margen para ajustar las propuestas y avanzar hacia una decisión final.

La presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana, María Claudia Lacouture, advirtió que el país necesita un acuerdo responsable, basado en la inflación y la productividad, para no poner en riesgo la recuperación económica.